Reconozco que con ellos no soy objetiva, es imposible serlo. Mónica y Yaco, la ya tan famosa boda cuqui, la boda del novio que llega a la ceremonia subido en una BMX, la novia que decide casarse en zapatillas converse en Quinta do Prazo.
Apenas llevaba 3 años realizando bodas cuando Mónica y Yaco confiaron en mi para fotografiar su día. Una boda atípica en la que no faltó nada.
Capitaneada por Lluvia de arroz en Quinta do Prazo, Portugal, con una novia guapísima maquillada por mi queridiña Ángela Garrote, y con un ramazo espectacular de, cómo no, Susiflor Invernaderos la boda de Mónica y Yaco fue especial, explosiva, llenar de color y alegría.











































































